En X-Men: God Loves, Man Kills, los mutantes se enfrentan a una de sus amenazas más peligrosas: el odio y el fanatismo. El reverendo William Stryker, un carismático líder religioso, lanza una campaña de odio contra los mutantes, considerándolos una abominación contra Dios. Mientras promueve su ideología extremista, los X-Men, liderados por el Profesor X, deben enfrentarse no solo a Stryker y su ejército, sino también a las profundas divisiones sociales y al temor hacia lo diferente. Esta historia, considerada una de las más impactantes de los X-Men, aborda temas como el racismo, la intolerancia y el poder destructivo del odio.